lunes, 30 de noviembre de 2009

"Siempre estamos a tiempo de cambiar"




Obviamente esto es más fácil de asimilar por parte de los escépticos del Todo si lo dice una señora que sabe de esto: Sarah Blakemore
Al hilo de todo esto me gustaría aprovechar para hablar de la falta de ambición. Me gustaría hablar de cómo algunas personas bajan los brazos por creerse incapaces de cambiar, de alcanzar nuevas metas o simplemente de desarrollar nuevas capacidades.Me parece fraudulento que alguien diga "no puedo", sobre todo en lo que ya se ha demostrado que otros si pudieron. En mi opinión hay personas que optan demasiado pronto por la condescendencia de sus vidas en vez de pelear por lo que quieren.
Qué fácil es sentarse a quejarse. Qué fácil ver lo que otros han logrado sin luchar, porque se lo han dado todo hecho y que nosotros debemos pelear por cada centímetro de avance en nuestra vida. Claro, esto es lo más sencillo, ver en lo demás lo que más nos conviene.
Pues que sepais que yo hago una defensa férrea de la gente que lucha por lo que cree cada día de sus vidas. Porque a algunos no nos lo han dado todo hecho , por eso cada logro es un triunfo.
Hago un llamamiento desde aquí a la gente que decidió luchar por sus sueños por muy insensatos que puedan parecer porque la burla de los cobardes no es mas que un disfraz de su propia autoestima pisoteada por el miedo. Y pueda parecer que a nosotros nos pisotee la vida por momentos , puede que nos hundamos en la tierra por la enorme fuerza de los acontecimientos pero hay algo que nos une a todos y es que cuando sabes por lo que luchas , cuando tienes la convicción otorgada por haberte sincerado contigo mismo, haberte enfrentado a tus fantasmas y haberlos derrotado, entonces ya no queda nada que te pueda parar, sólo la muerte.Y morir nos vamos a morir todos, es lo único cierto en la vida por lo que os aconsejo aceptarlo lo antes posible.




martes, 3 de noviembre de 2009


Todavía me queda mi libertad.Qué reconfortante.Hay días realmente complicados de digerir.
De lo que quiero hablar hoy es de lo difícil que resulta a veces seguir la senda correcta cuando uno ve desdibujarse el camino. Tengo mis planes, un gran proyecto para mi vida, pero debido a las dificultades que van surgiendo uno se replantea muy a menudo que camino seguir.
Tengo responsabilidades, gente que cuenta conmigo, ya no estoy solo y mientras tenga gente dependiendo de mi tendré que comerme mi angustia y transformarla en trabajo e ideas.
Afortunadamente me queda la capacidad de elegir si sigo adelante o me rindo. La vida me ha enseñado que por desesperante que resulte una situación siempre existe un camino,una alternativa que desembocará en un momento mejor.